Sin duda un maestro del fotomontaje y la ilustración, que nos traslada a mundos imaginarios llenos de ironía unas veces, de dolor otras, pero con un trasfondo de historias contadas, imagen tras imagen con gran realismo.
El tratamiento de la imagen que hace Salamanca, va mucho más allá del simple retoque, es como si convirtiera las fotografías a dibujo pero sin perder ese valor fotográfico.
En su página oficial, podremos contemplar el antes y después de alguna de sus creaciones.